Entregan chalecos balísticos a Policías de Guadalupe

Al preservar la salud y la integridad de los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, el Municipio de Guadalupe hizo entrega de chalecos balísticos para su protección.

La Presidenta Municipal puntualizó que la seguridad es una prioridad en Guadalupe, por lo que señaló la importancia de proveer del equipo necesario a los elementos de seguridad.

Asimismo, la Presidenta Municipal destacó que han reconocido a más de 650 elementos de la Policía de Guadalupe por participar en acciones relevantes para la comunidad.

“Hoy, nos toca a nosotros, desde la oficina de la presidencia y del Secretario – Jorge Márquez- proteger y salvaguardar la vida de ustedes, y no hay mejor medida que portar un chaleco” detalló la Presidenta Municipal.

Además, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del Inegi, la percepción de inseguridad disminuyó un cinco por ciento en comparación del sondeo realizado en diciembre de 2023.

Anteriormente, el Municipio hizo entrega de uniformes y chamarras de invierno a los elementos de la corporación.

Érase una vez un cordero muy consentido por toda una familia en especial de la hija menor. Un día adoptaron a un cachorro y cada día se ganaba más la atención por parte de la niña.

El cachorro recibía muchas palmaditas y amor por parte de todos y el cordero que se dio cuenta que ya no era el favorito, se volvió egocéntrico y egoísta. Aunque estaba bien alimentado y era bastante consentido, la familia ya casi nunca le prestaba atención.

Pretendiendo tener toda la atención de la familia, el cordero envidioso solo pensó en una cosa: si imitaba el comportamiento del perro probablemente llamaría la atención de todos de nuevo.

Un día el cordero se escapó de su corral y comenzó a comportarse como el perrito, así que se paró sobre sus 2 patas traseras y intento lamer a la pequeña niña, pero al ser más pesado que ella la tiró al suelo y se golpeó muy fuerte en la cabeza.

El padre de la niña, furioso, tomó al cordero y lo llevo a donde tenía encerrado al resto de los animales y dijo: «Torpe Cordero le hiciste daño a mi hija, debería cocinarte para que aprendas».